sábado, 20 de febrero de 2010

La cocina de mi felicidad


Ellas sonreían
Se odiaban
Se miraban
Por la mañana se levantaban y desayunaban, como hacemos todos, y se sentaban a contemplar el reloj, la televisión. Las horas muertas, las horas vivas, las discusiones, las comidas, los momentos de risas.
Olores.
Relojes en las paredes.
La manta en la silla, sus pies debajo.
La mecedora, la otra mecedora.
El reflejo de la puerta a través de una pantalla
Amor y pasión
Pasión
Muerte
Vida
Vivir
Recordar, siempre recordar.

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