lunes, 29 de noviembre de 2010

Realidad


Uno no mira su reflejo para ver su imagen. Uno se mira para ver lo que no consigue ver con el paso de los años. No es egocentrismo, es la confirmación de la triste o alegre realidad.
Cuando me miro al espejo tiemblo por dentro. Puedo ver a mi lado todos los fantasmas que habitan en mi. En realidad siempre están conmigo.
Puedes esconderte detrás de la cámara o detrás de un sombrero. Da igual, el reflejo siempre será tu imagen, tu vida, lo que tú eres y has sido.
No hay mas pureza que uno frente a uno mismo. No hay más verdad. No hay nada más frontal. Tú contigo.
Tu pena, tu piel, tu sonrisa.


Londres, noviembre 2010

1 comentario:

Síndrome Coleccionista dijo...

Eres todos los caminos que has decidido, las personas que has conocido, eres lo q has podido ser pero todo puede cambiar si tu quieres